martes, 27 de marzo de 2012

... ¿? ¡ ! ( ) - " "

Mazatlán, Sinaloa, a 29 de marzo de 2012.






Puntos suspensivos (tres puntos) ...

Los son tres puntos seguidos, no más de tres, que utilizamos para indicar:

1) Interrupción:

Si lo respeto mucho; pero ...

2) Expresar temor, duda o lago sorprendente:

No me decidía a estrechar la mono de un... asesino.
Empiezo a comprender por qué la quería y por qué... la odiaba.
Abrí la puerta y... ¡horror!... Un espectáculo dantesco.
3) O escribirlos en lugar de etcétera:

Numerosos son los grandes caudillos de la historia: Cesar, Felipe II, Bismarck...





Signos de interrogación ¿? y admiración ¡!
Estos signos expresan preguntas o asombro. Lo interesante de ellos es que no excluyen el uso de los demás signos de puntuación:
-¿Desde cuándo lo conoces?, preguntó Pedro.
-¡Por favor, señor!, exclamó la muchacha.

Cuando se comienza la oración, después del signo de interrogación o admiración se escribe la primera letra con mayúscula. Cuando la interrogación o la admiración está en medio de la oración, se escribe con minúscula:
– Mamá, cuando sea más tarde, ¿podré salir a jugar?
 Después de tanto tiempo, ¡qué alegría volver a verte!


Guión mayor - y paréntesis ( )
El guión mayor sirve para separa elementos intercalados en la oración.
Hombres, mujeres y niños -los había para todos gustos- se apelotonaban dentro del autobús.

Los paréntesis sirven para separar elementos incidentales en la oración. Incidental se dice del suceso que repercute en un asunto.
El mariscal Von Paulus (nació en 1890) fue un hombre enigmático. 




Las comillas

Sirve para dar énfasis a una palabra o frase; pero no se debe abusar de esta función, ante todo por razones de estética tipográfica:
Como modelo de la primera conjugación, se utiliza usualmente el verbo "amar".

Para citar títulos de artículos, poemas, cuadros…
Nos leyó en voz alta el "Romance sonámbulo" del Romancero Gitano.

Para indicar que una palabra o expresión es impropia, vulgar o de otra lengua, o que se utiliza irónicamente o con un sentido especial:
 En el salón han puesto una "boiserie" que les ha costado un dineral.

Y en marcar una palabra nueva o poco conocida:
Esto de los "blogeos", no acabo de entenderlo. 

jueves, 22 de marzo de 2012

Un punto; dos puntos; tres ...

Mazatlán, Sinaloa, a 22 de marzo de 2012.

Punto
El punto es el signo que nos permite separar oraciones. 

El punto  (.) señala la pausa que se da al final de un enunciado. Después de punto –salvo en el caso del utilizado en las abreviaturas– siempre se escribe mayúscula.



Hay tres clases de punto: el punto y seguido, el punto y aparte y el punto final.




El punto y seguido separa enunciados que integran un párrafo. Después de un punto y seguido se continúa escribiendo en la misma línea. Si el punto está al final del renglón, se empieza en el siguiente sin dejar margen.



 Salieron a dar un breve paseo. La mañana era espléndida.


El punto y aparte separa dos párrafos distintos, que suelen desarrollar, dentro de la unidad del texto, contenidos diferentes. Después del punto y aparte se escribe en una línea distinta. La primera línea del nuevo párrafo debe tener un margen mayor que el resto de las líneas que lo componen, es decir, ha de quedar sangrada.


El mar estaba embravecido aquel día. Los barcos bailaban sobre el agua sorteando las olas con dificultad.

 Miguel, sentado en el muelle, esperaba el regreso de su padre.

 Atisbaba el horizonte buscando ansioso su barco con la mirada.


El punto final es el que cierra un texto.

 Este es el final del texto.

El punto se utiliza también después de las abreviaturas. Hay también abundantes excepciones a esta regla. Así, los símbolos de los elementos químicos y de las unidades de medida se escribirán sin punto.

 Sra., Excmo., cf.

 Au, Ag, km


Dos Puntos
 Éstos indican que tras de ellos viene una enumeración.

Tres nombres destacan en la poesía española moderna: Juan Ramón Jiménez, Antonio Machado y Federico Gracía Lorca.


Los dos puntos conectan proposiciones donde la segunda es consecuencia de la primera.

Está lloviendo: no podremos ir a la playa. 


Indican trascripción o citas textual. 

Benito Juárez dijo la frase: “El respeto al derecho ajeno es la paz”.



Busca en el libro, que estás leyendo, ejemplos del uso correcto del punto y los dos puntos.




jueves, 15 de marzo de 2012

La unión del punto y la coma

Mazatlán, Sinaloa a 15 de marzo de 2012.

Seguimos con la coma

En oraciones elípticas hay que poner coma en el lugar del verbo:
Manuel era simpático; Pedro, antipático.

La oración elíptica es aquella que presenta omisión de alguno de sus elementos por estar implícita en el contexto. O sea, elimina alguna palabra por entenderse que ya está ahí.
Por ejemplo, Manuel era simpático; Pedro, antipático. (en este caso se omite el verbo "era" en la segunda oración y se coloca una coma).
 
A veces se usa la coma para separar oraciones enlazadas por la conjunción "y", en los casos en que pudiera haber confusión:

Pedro le gusta el trabajo, y el ocio lo consideraba absurdo.

En este caso, se ha puesto una coma para precisar el sentidos; sin ese signo, pareciera que " A Pedro le gusta el trabajo y el ocio". Además, Pedro nos es el sujeto de la segunda oración, es el ocio.






Punto y Coma


Ahora, nos concentraremos en el punto y coma.

El punto y coma (;) es un signo de puntuación que consta de una coma con un punto sobre ésta. Se utiliza para unir oraciones:


Relacionadas al mismo sujeto:
María estaba apenada por el examen. + María tendrá que estudiar más.  
María estaba apenada por el examen; tendrá que estudiar más.

Subordinadas, por causa y consecuencia:
Está lloviendo mucho (causa) + No podremos ir caminando (consecuencia)
 Está lloviendo mucho; no podremos ir caminando. 

Generalmente se puede sustituir por construcciones del tipo:
María estaba apenada por el examen y tendrá que estudiar más.
No podremos ir caminando porque está lloviendo mucho.

Unir oraciones coordinadas, que ocurren al mismo tiempo.
Llegamos al cine; la película ya había comenzado.

Enumeradas:
 Había que estar en contacto con la naturaleza; dejar entrar el cielo, el mar y el viento; 
dormir a ras del suelo; sentarse en sillas medio rotas.

En secuencia temporal, seguidas una de otra:

 La primera parte de la obra era interesante; la segunda, insípida; la tercera, francamente aburrida.
Primero fuimos al parque a caminar; después, a cenar a la luz de las velas; finalmente, a bailar bailar bajo la luna llena.

También, se escribe antes de las conjunciones o locuciones como pero, mas, aunque, sin embargo, por tanto, por consiguiente, cuando los periodos tienen cierta longitud: 

Nos llevó mucho tiempo acabar ese trabajo; sin embargo, los resultados no fueron los esperados. 

Busca en el libro, que estás leyendo, ejemplos del uso correcto de la coma y del punto y coma.


domingo, 11 de marzo de 2012

Después del primer día...

Mazatlán, Sinaloa, a 8 de marzo de 2012.

A un mes de trabajo, muchos de los chicos están por concluir su segundo libro.

Es ahora, cuando retomamos los comentarios del primer día:

 
No acostumbro leer.
Jamás, había tenido el hábito de leer.
No estoy muy acostumbrada a leer.
No suelo leer mucho.
La verdad, yo casi nunca leo.
Que flojera leer tantos libros.
Son contados los libros que he leído.
No estoy muy acostumbrada a leer
Nunca he leído demasiadas hojas, mucho menos un libro entero.
No tengo el hábito de la lectura.
Sentí flojera, al imaginar tener que leer tanto.
No leo muy seguido.
No estoy acostumbrada a leer mucho.

La verdad, casi no leo libros.
Casi no me gusta leer.
No me gusta leer.
Soy de las personas que no practica la lectura.
No he tenido el hábito de la lectura.
Me daba flojera y los dejaba enteros.
No acostumbro a leer.
No me gusta leer.
No estoy acostumbrado a leer.
Casi no me gusta leer.
No estoy muy acostumbrada a leer.
No tengo el hábito con libros.



Entonces, la pregunta correspondiente es:

¿Porqué crees que no les gusta leer 
libros a los jóvenes?
Escribe tu respuesta a esta pregunta.

sábado, 10 de marzo de 2012

No te comas las comas.

Mazatlán, Sinaloa a 8 de marzo de 2012.
Ahora vamos a utilizar los signos de puntuación.

¿Te imaginas que no existieran los signos de puntuación?
Nos resultaría difícil entender lo que leemos; porque no es lo mismo:
Pásame la sal gorda.
Pásame la sal, gorda.

El uso de los signos de puntuación proporciona al texto una estructura que facilita la lectura y comprensión del mismo.


La coma 


La coma (,) es un signo de puntuación que señala una breve pausa que se produce dentro del enunciado.
Se utiliza para:

Separar los elementos de una numeración:
Tengo perro, gato, pájaros y un hamster.

Delimitar o diferenciar una aclaración:
Luisa, mi prima, acabó ya la carrera.

Separar expresiones del tipo: en efecto, sin embargo, por ejemplo, es decir…
Vamos a jugar al balón, es decir, al baloncesto 

Aislar el nombre de alguien al que llamamos, es decir, un vocativo:
Ven aquí, María.

En oraciones elípticas hay que poner coma en el lugar del verbo:
Manuel era simpático; Pedro, antipático.

A veces se usa la coma para separar oraciones enlazadas por la conjunción "y", en los casos en que pudiera haber confusión:

Pedro le gusta el trabajo, y el ocio lo consideraba absurdo.

En este caso, se ha puesto una coma para precisar el sentidos; sin ese signo, pareciera que " A Pedro le gusta el trabajo y el ocio".

Pero, existe algo llamado la coma criminal que es un error de puntuación; un uso incorrecto de la coma.

Cuando se escribe:
 Yo, me quedo sin palabras.

Se está separando con una coma asesina la unión sacramental entre el sujeto "yo" y el verbo "me quedo".


Busca en el libro, que estás leyendo, ejemplos del uso correcto de la coma.